Funciones que debe realizar un promotor en el punto de venta

El trabajo de un promotor de marca implica algo más que la simple comprobación y muestreo de productos en una tienda.

Un promotor es la cara pública de una empresa, con la autoridad para anunciar la marca y sus productos dentro de un punto de venta.

De acuerdo con las estadísticas de una encuesta realizada sobre el comercio minorista, el 9.3% de los clientes mexicanos cree que un promotor tiene el potencial de influir y afectar su elección final de compra.

Aunque pueda parecer que el único objetivo de un promotor es ofrecer muestras de productos, ésta es sólo una de las numerosas tareas que debe realizar en cada visita a un punto de venta, destacando las cinco siguientes:

Prueba de producto

Ofrecer pruebas de productos, artículos o degustaciones de alimentos, como la mayoría de la gente cree, es una de sus principales funciones y tiene una mayor influencia en los compradores, porque estar en contacto directo con el producto y con un representante de la marca puede influir en la decisión de compra del cliente y hacer que elija su producto.

Informar al consumidor y atender sus dudas puntualmente

Todo promotor debe ser capaz no sólo de hacer una prueba, sino también de ilustrar al público objetivo sobre una determinada marca y el producto que se está promocionando, proporcionar datos intrigantes que despierten el interés del comprador y estar preparado para responder a sus preguntas. Si realiza esta tarea, no sólo venderá más, sino que aumentará el compromiso del cliente.

Cerciorar el óptimo acomodo del producto en anaquel y exhibiciones

Debe asegurarse de que la cantidad del producto exhibido en el estante es suficiente, de que no hay roturas de producto, de que el nombre de la marca y el producto estén visibles, así como en sus exhibiciones adicionales.

Revisar disponibilidad de bodega

Es fundamental que el promotor inspeccione el almacén para establecer si la cantidad de mercancía disponible es suficiente para satisfacer la demanda, informar de ello y alertar si es necesario un stock adicional en el almacén.

Cuidar la limpieza de la exhibición

Cada promotor debe mantener limpia la zona y los artículos expuestos en el estante y en los lugares adicionales para no crear una imagen de marca negativa, y que el consumidor no desconfíe al ver un lugar sucio o que no esté bien organizado.

En resumen, el trabajo de un promotor no sólo consiste en ponerse delante de un cliente y pronunciar un discurso memorizado sobre un producto concreto, sino también en velar por los intereses de la marca a la que representa perfeccionando ciertas habilidades para llegar al cliente, persuadirle y convencerle de que compre su producto.